Caprichos
El la era dos en una ; Una persona de día y una extraña en las noches. Se enamoraba de la luna y los hombres la admiraban como ninguna. Era poesía estratégica, Te hacía un universo social. Le hablabas de locura, Y su presencia, te llenaba de lujuria. Salió en la noche, Vestida de derroche. Miro en la pared el único refrán. "Encuentra lo que amas y deja que te mate" Suspiro lento, mientras llenaba su mente de recuerdos. Tenía un corazón extinto. Mucha magia y pocos caminos. Sonreía sin cesar, con la ansía de un niño inmortal. Él era un fanático, inseguro y pretencioso, con una mirada de oro, No tenían color sus zapatos, pero sus huellas eran eternas, como una cicatriz. Se desconocían así mismos, Se reconocían bajo el huracán de las letras, la música, la tierra y la ironía. Ella era una en dos. Él la conoció de día y se enamoró. Él la...